Según excavaciones arqueológicas, la Medicina Tradicional China (MTC) tuvo sus orígenes hace mas de 3.000 años. Se han hallado huesos y caparazones de tortugas con grabados de enfermedades, sus síntomas y tratamientos. Ya desde el año 1000 a.C. existía en China un cuerpo de médicos que seguía ciertos métodos de sanación.
Aproximadamente 200 años a.C. se reune todo el saber acumulado por la tradición en el Canon de Medicina Interna (Huang Di Nei Jing) en el que se describen muchas enfermedades, su diagnóstico y tratamiento. A partir del siglo VII d.C. y debido a la reunificación de China, el desarrollo y la expansión de la MTC son muy rápidos, apareciendo numerosos y reconocidos médicos por todo el país. En esta época se escribieron 14 tratados de medicina, que se conservan hoy en día. Debido a ciertas circunstancias históricas, se desarrollan dos de las facetas más interesantes de esta ciencia: el diagnóstico por el pulso y la acupuntura.
La MTC, a partir del siglo X, se sistematiza como una ciencia médica avanzada y completa, valiéndose de diferentes herramientas terapéuticas como Acupuntura, Moxibustión, Masaje, Fitoterapia y Qigong.
Desde el punto de vista de la MTC el cuerpo es un todo, por el que discurre la energía vital llamada Qi. El desequilibrio de éste provoca la enfermedad. De manera que su tratamiento, más que destinado a la curación de un síntoma concreto, se enfoca al restablecimiento del equilibrio energético corporal. El Qi fluye por canales o vías de luz que unen los órganos internos y con su estimulación se consigue el tratamiento de las enfermedades que les afectan.
De las numerosas técnicas médicas de China, la acupuntura es la más conocida y la que más seguidores ha encontrado en occidente. Consiste en la estimulación, con unas finas agujas metálicas, sobre puntos llamados resonadores, que se ubican en los canales por los que circula la energía del cuerpo. Estas agujas funcionan como pequeñas antenas, que restablecen el flujo del Qi. Hoy en día las agujas son hechas de acero inoxidable y son de un solo uso.
Una muy efectiva técnica sin agujas es la moxibustión. Aquí se utiliza la «moxa» (un puro fabricado con Artemisa), que se enciende para aplicar calor sobre los canales o los resonadores.
Actualmente la MTC es utilizada en gran parte del mundo. Cada vez hay más personas que recurren a la acupuntura y moxibustión para el tratamiento de sus enfermedades. Es una forma de sanar efectiva, natural y sin efectos secundarios.
El 16 de noviembre de 2010 la UNESCO declaró la Acupuntura y Moxibustion china como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
